Las empresas están tomando conciencia de la necesidad de contar con soluciones de backup para asegurar la continuidad del negocio y la seguridad de sus activos digitales. En este contexto, implementar tecnologías innovadoras se convierte en una prioridad para garantizar la continuidad de las operaciones.
Por otro lado, la falta de implementación de estas tecnologías ha tenido consecuencias importantes en la continuidad de los servicios de grandes empresas, tanto públicas como privadas.
Bajo este escenario, Juan Manuel Pascual, experto en ciberseguridad y CEO de Innovery España y LATAM explica: “cuando aparecen noticias de empresas a las que les bloquean sus sistemas, lo único que pone de manifiesto es que sus políticas y soluciones de continuidad de negocio han fallado”.
Las consecuencias de no contar con estas soluciones pueden llevar desde la pérdida de datos críticos, interrupción de la continuidad del negocio hasta la reducción de la productividad, al tener que dedicar más tiempo y recursos a reconstruir los datos perdidos.
Backup, en el punto de mira
Implementar una arquitectura hiperconvergente brinda la posibilidad de recuperar información de manera más eficiente, sin importar la cantidad de datos a recuperar.
Este tipo de arquitecturas plantean soluciones a los nuevos desafíos que las empresas deben hacer frente a la hora de escoger una solución de backup. Entre ellos, Innovery señala los siguientes:
Aumento de velocidad. Los negocios van cada vez más rápidos y la información que se genera, también. El volumen y la complejidad de los datos se ha disparado en la última década, y plantea enormes retos de capacidad y seguridad a las organizaciones. Buscar soluciones escalables, es lo primero
El ransomware como amenaza principal. Ninguna empresa está exenta de ser víctima de un ciberataque. Es más, las organizaciones españolas no están preparadas para responder.
El ransomware se ha consolidado como su gran amenaza. Los cibercriminales tienen muy claro que uno de sus principales objetivos es bloquear o cifrar la información para así paralizar los sistemas y servicios de las compañías. Hasta hace unos años, un ataque de ransomware se producía en un dispositivo aislado, pero actualmente se expande por los sistemas, impidiendo la continuidad del negocio.
Tomado de: RevistaByte